El principal problema que te puedes encontrar cuando vas a comprar una crema para tu piel, es la cantidad de marcas de cosmética que existen en el mercado. Y es que ante tal escaparate es difícil saber cuál escoger, aunque la gran mayoría de veces nos guiamos por recomendaciones o por el reconocimiento de la propia marca.

La tendencia de productos naturales y ecológicos también está favoreciendo la  elección de marcas de cosmética natural. Estos productos son mucho más beneficiosos para nuestra piel, ya que están formulados a base de ingredientes naturales, y sus principios activos penetran profundamente en la piel. Por ello, los resultados son prolongables en el tiempo y más efectivos, que con marcas de cosmética tradicional.

Ingredientes tóxicos en la cosmética actual

Pero, ¿cuáles son los ingredientes que lleva la cosmética industrial, tan peligrosos para nuestra salud cutánea? A continuación, te dejamos una lista, de algunas de las sustancias tóxicas que debes evitar:

  • Parabenos
    Dentro de los ingredientes tóxicos y peligrosos utilizados en los productos de cosmética e higiene, se encuentran los parabenos, compuestos químicos con propiedades bactericidas y fungicidas, utilizados para alargar la vida del producto e impedir que sea atacado por bacterias y microorganismos.El problema de casi todos los aditivos es que forman parte del 99% de los productos que consumimos a diario, por lo que se acumulan en nuestro organismo a un ritmo mayor de lo que nuestro cuerpo es capaz de asimilar.
  • Aceites Minerales
    Los aceites minerales (Paraffinum, parafinum liquidum, mineral oil…) son compuestos muy usados en la cosmética tradicional para hidratar  la piel.Son derivados directos del petróleo, muy estables, de fácil extracción y muy baratos. Ofrecen una textura fina y sedosa  y al ser aplicados sobre la piel, la dejan suave y con “sensación” de alta hidratación. Y lo peor es que estos aceites minerales no hidratan en absoluto. Lo que provocan es la creación de una película de aceite que obstruye los poros, impidiendo la transpiración de la piel, y su posterior deshidratación.
  • Colorantes Artificiales
    Son sustancias que se usan para darle el color deseado a cremas, geles de baño, maquillajes, tintes, etc. Muchos de ellos han demostrado ser altamente cancerígenos y alterar las moléculas de ADN. Sus denominaciones incluyen las sílabas -anilin- o -anilid- (por ejemplo, el acetanilid).

  • Formaldehídos
    Se trata de uno de los conservantes más utilizados por ser un potente anti-micótico. Exponerse a ellos puede causar dolores articulares, dolores de cabeza o de pecho así como alergia, irritación y envejecimiento prematuro de la piel.Su uso está prohibido en cosmética pero, ya que se trata de un conservante muy barato y efectivo, la industria se las ha ingeniado para crear sustancias que directamente no se pueden considerar formaldehído pero que lo liberan.
  • Alcohol
    El alcohol es un buen conservante: es antiséptico. Un antiséptico es un producto que evita infección y que mantiene la zona purificada. No obstante, el alcohol reseca y deshidrata la piel.
  • Lanolinas
    La lanolina es conocida como la cera de lana o la grasa de la lana, ya que es la sustancia grasosa amarilla de los animales de lana. En realidad, es la sustancia secretada por las glándulas sebáceas de los animales de lana y que se convierte en una crema muy útil y recomendable para muchos cosméticos.

  • Miristato Isopropilo
    Es un éster de ácido graso de baja viscosidad que se utiliza en cosmética para hidratar la piel o para facilitar la penetración de fármacos.Muchas cremas hidratantes utilizan una combinación de Vaselina y Miristato de Isopropilo ya que la  vaselina no se absorbe fácilmente en la piel, mientras que el Miristato de Isopropilo sí. Cuando estas dos sustancias se combinan, los productos pueden ser absorbidos demasiado profundamente en la piel, provocando  la obstrucción de los poros, y la deshidratación propia de la piel.
  • Dimeticona (PDMS)
    La Dimeticona es una de las siliconas más utilizadas en cosmética, y como tal es un polímero que se obtiene por medios químicos a través del silicio.La película que forma sobre la piel la aísla y protege, pero al mismo tiempo bloquea los poros, haciendo más difícil que elimine las células muertas o impurezas a través del sudor o el sebo. Esto, a su vez, favorece que los poros se abran y bloqueen el funcionamiento natural de la piel.
  • Laurisulfato de Sodio
    El laurisulfato de sodio, o SLS, un ingrediente común en los productos de higiene personal. Es un aditivo  que permite que los productos de limpieza formen espuma.Según la base de datos Skin Deep Cosmetics Safety Database de Enviroment Working Group (EWG), el SLS es un “peligro moderado” que se ha relacionado con el cáncer, la neurotoxicidad, la toxicidad en los órganos, la irritación de la piel y el trastorno endocrino.

Como leer la etiqueta de los productos

Cuando elegimos un producto cosmético, no solo debemos fijarnos en sus componentes, sino también el orden que ocupan estos en la etiqueta. Porque, cuanto más al final de la lista se posicione el ingrediente,  menos cantidad de este se encontrará en el cosmético. Si un cosmético se anuncia como hidratante / antiarrugas con Colágeno, este debería estar entre los 5 primeros ingredientes para que sea eficaz. Y es que, para que un principio activo cumpla su función, su concentración debe ser mínima, del 5% (excepto el Ácido Salícilico, que no debe superar el 2%)

Con estas directrices, ya sabemos cómo poder comprar un producto cosmético sin dañar nuestra piel: leer la etiqueta, y mejor aún, recurrir a marcas de cosmética natural como es el caso de Pevonia.